Después de reflexionar sobre la presencia de frutas mexicanas en otros países surgen las siguientes interrogantes:
¿Por qué estos productos de tan alta calidad no tienen una mayor difusión dentro del mercado local?¿Cuál es el precio por tonelada que les pagan a nuestros productores por estas frutas de tan alta calidad y con tanto éxito en mercados internacionales?
¿Por qué no se instrumentan programas que incentiven la reactivación del campo en nuestro país?
¿Por qué importamos frijol, trigo, arroz y maíz cuando tenemos un gran potencial de producción?
En cada rincón de nuestro país encontramos historias de éxito de mujeres y hombres comprometidos, como la de estos productores que exportan sus mercancías de gran calidad y que representan un orgullo para los que tenemos la oportunidad de viajar y ver la leyenda “Producto de México”.
Pues definitivamente resulta un tanto frustrante que teniendo el potencial de producción que mencionas, se tenga que pagar por importar productos que somos capaces de abastecer internamente, y en contraste que bueno que haya empresas que logran sobresalir internacionalmente, y que en cuyo caso habría que ver que tan bien pagan a los productores de esos productos.
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